Giro NalgaduraTrabajo: Sexador de pollos
Poder: Manipulación del espacio-tiempo
Japonés de necesidad, Giro trabaja de sexador de pollos en la empresa de su padre, lo peor es que Giro no distingue un pollito de una lagartija y todos los que selecciona no sirve para nada. La culpa es de que en la cadena de producción le ha tocado enfrente del gran reloj que marca los horarios de trabajo.
Como a nuestro personaje le gusta menos el trabajo físico que a un concursante de Gran Hermano, se pasa las horas mirando el reloj absorto pensando que si sigue el segundero el tiempo pasará rápido, cuando en verdad lo que hacía sin querer era ralentizar el tiempo. Eso hacia sus horas laborares interminables.
De repente en un momento que va a mear, se encuentra en el aseo de pared a su amigo Corro, que al ponerse a su lado para empezar a mear, su amigo se gira para saludarle sin darse cuenta que aun estaba meando. El susto ante la inminente regada de orín, hace que Giro detenga el tiempo y así, darse cuenta de su poder, claro que, el pobre se aburre mucho y empieza a hacer putadillas, cambiar cosas de sitio, poner a Corro delante de su propia meada... cosas por el estilo.
Al poner el tiempo en play digamos que la gente, aunque confusa la emprende con Giro, no porque sepan que es el causante, sino porque siempre es el pelele con el que se desfoga la gente, así que al acorralarlo ve encima de una estantería una figurita de Sevillana de plástico y se teletransporta a en medio de la feria de Abril.
Tras un par de rebujitos, hace amistad con unos madrileños que estaban de vacaciones (Mauricio Colmenero y Torrente). Como dinero había poco, les promete que si le pagan la fiesta, Giro les llevaría de vuelta a Madrid sin preocuparse del billete de avión.
Cuando se teletransporta a Madrid va al Museo del Prado y en el cuadro "Relojes Blandos" cual es su sorpresa cuando descubre que el reloj de la mesa ¡ES SU CARA DERRETIDA! por ello y porque tiempo le sobraba... decide ir a ver al autor a su estudio, el pintor "Dalí Méndez" el cual le desvela el futuro, la bomba y tal y cual y pascual.
